Cartas a quien pretende enseñar.

Este libro consta de 10 cartas en las cuales el autor plantea sus idea de como se debe enseñar, como  debe ser la relación entre el profesor y el educando y viceversa.

En la primera carta, Paulo hace mención del termino enseñar-aprender, pretende explicar que existe un aprendizaje mutuo (maestro-alumno y viceversa) también explica que para él es fundamental que el sistema del aprendizaje se base entorno al estudiante.

En la segunda carta explica el miedo a las dificultades, el autor quiere que se sepa que el tener miedo no es nada malo, pero eso no significa que hay que dejar que el miedo  gane.

En la tercera, manifiesta la intranquilidad por aquellos  que solo piensan que el ser docentes es una obligación.

En las próximas dos cartas, paulo explica de aquellas cualidades que se debe tener al ser docente, dice que cada una de ellas se deben de manifestar desde que se empieza el primer día.

En la sexta y séptima  el autor expresa que cuando se trata de hablar con el educando se debe tener en cuenta que se habla a él y con él. Menciona que no se debe decir “no lo hagas” y luego hacerlo, eso sería perder todo lo que nos acredita.

En la carta octava y novena, se hace mención que para poder crear las estrategias para poder ejercer y enseñar al educando se debe tener en cuenta lo que es la identidad cultural y educacional.

En la última carta, la décima, paulo plantea la que significa la disciplina, nos expresa que el educando debe tener una autoridad pero con libertad e ir poco a poco forjando una disciplina intelectual.

En este libro, nos muestra que el profesor cumple una parte importante dentro de la educación del individuo.